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#CulturaLadoB: Los besos + Luciano Lutereau y Festival Disruptivo

#CulturaLadoB: Los besos + Luciano Lutereau y Festival Disruptivo

Una guía de pequeñas delikatessen del arte y la cultura contemporáneos que se desarrollan en paralelo a los circuitos masivos

Por Esteban Castromán / Iñaki Echeverría

Los besos + Luciano Lutereau // Perdón, pero no sé quién es usted

«Por lo general se piensa que se besa con los labios, pero es con la mirada que se actúa el beso.  Los labios simplemente acompañan. Siempre es encantador ese momento en que casi por azar dos personas quedan enfrentadas y no hay otra opción que besar. Al beso se condesciende, más allá de la voluntad. El neurótico padece la búsqueda del beso, el cálculo y la ocasión, y se olvida de la mirada. El neurótico no ve la mirada. Pero la mirada se ve, por ejemplo, para besar. Al menos en el primer beso. Los demás obedecen a otras formas pulsionales: besos robados, besos brujos, besos escatimados, besos negros, besos suspirantes, besos aspirados, besos risueños, besos ruidosos, etcétera…», escribe Luciano Lutereau en su artículo Tontas canciones de amor publicado el domingo 8 de abril de este año en el diario El Litoral de Santa Fe.

Luciano es un amigo inquieto que además de ser psicoanalista, doctor en Filosofía y doctor en Psicología, creó junto a Marina Gersberg el potente sello editorial Pánico el Pánico, hace más de 10 años. Y en este mismo texto agrega: «Nos mandamos besos por celular, nos enviamos canciones, para sustituir una palabra faltante, para estar en contacto, pero sin que nada nos toque (…) La palabra de amor es la que falta. Y la sustituimos con conversaciones ordinarias».

Canciones extraordinarias es lo que hubo el jueves 11 de octubre en Xirgu Espacio Untref (esa hermosa sala de conciertos y teatro ubicado en Chacabuco 875, San Telmo) cuando se presentó el nuevo disco/libro de Los besos, Copia viva.

Los besos es un grupo formado en 2011 por Paula Trama (voz y guitarra), Ariel Chisleanschi (batería), Sebastián Rey (bajo), Federico Fragalá (teclados) y Víctor Rallis (trompeta y coros). Antes de Copia viva ya habían sacado tres.

Copia viva es un disco con diez hermosas canciones, pequeños remolinos sensibles en los que perderse. Pero también es un libro (editado por Triana Editorial, con arte de tapa a cargo de Ian Kornlefd) que recorre toda la discografía de Los Besos, con letras y acordes, en formato de cancionero.

La presentación en el Xirgu fue, como experiencia colectiva, para quienes integrábamos aquella cofradía de admiración sincronizada, una exquisita forma de envolvernos en cierta homeostasis sensible con estribillos y besos posibles. Porque (casi) todos coincidíamos: si enviar canciones al espacio inmediato no es más que una manifestación de amor, la propuesta musical de Los besos lograba cautivarte con su magia pop mediante un simple cruce de miradas.

La presentación en el Xirgu fue, como experiencia individual, además, al menos para mí, una exquisita forma de locura. Porque en el vaivén de la noche creí reconocer entre la multitud a mi amigo Luciano. Y al ser un contexto de besos y canciones y ruido y cosas probablemente imposibles de decir, me acerqué, lo abracé y le dije: «tenías razón, Luciano… eso de que enamorarse es algo así como habitar una playlist con tontas canciones de amor…».

«Perdón, pero no sé quién es usted», me respondió un sujeto que claramente no era mi amigo Luciano, con un notable propósito de rechazo y hostilidad, tal vez envalentonado por el signo impune de esta época violenta.

Su respuesta cortamambo me afectó durante tan solo siete segundos, porque al toque volvieron a sonar Los besos en el escenario y obtuve un entendimiento epifánico: si el amor es lo que falta y solemos sustituirlo con palabrería espeluznante, deberíamos hacer algo al respecto.
*Los besos
Copia viva

Festival Disruptivo // Un abrazo a la edición independiente

Este domingo a partir de las 18h en Luz Artificial, la editorial independiente Elemento Disruptivo festeja sus cuatro años con poesía, sorteos y vermú.

Leen Micaela Szyniak, Vera Buendía, Walter Godoy, Adrián Agosta, Alejandra Zani, So Sonia, Guillermo Villani y Martina Cruz.

Sus organizadoras lo describen así, en formato carta de invitación, que también es un manifiesto:

«Estimadxs galácticxs del amor a la palabra. Aquí las Disruptivas estamos juntando caudal monetario para re-imprimir tan lindas producciones de poetas amigxs y parecernos al tío rico. Como se imaginarán, el precio de imprenta no tiene sentido, no hay coherencia ya en este espacio de la tierra, pero nosotras queremos ser tercas y vencer al Darth Vader de la impresión. Para eso, hemos decidido reunirnos y armar un scrum de poetxs para delirar y enviar globos de indiferencia a las nubes negras que nos rodean. En fin, nadie lee esto. Sólo queremos invitarlxs a un gran abrazo independiente.»

La entrada es libre y gratuita. La dirección se pide acá.

*Festival Disruptivo
Domingo 21 de octubre a las 18h

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