El Gobierno de Argentina ha anunciado que mantendrá el fin de semana largo que coincide con el domingo 19 de noviembre, día en el que se llevará a cabo el balotaje que determinará al próximo Presidente de la Nación. Esta decisión se ha tomado a pesar de la sugerencia de la Cámara Nacional Electoral (CNE) de trasladar el feriado del lunes 20, argumentando que su mantenimiento podría desalentar la concurrencia a las urnas.
Fuentes de la Presidencia han argumentado que se busca proporcionar «previsibilidad» a las personas que ya han adquirido vuelos y reservas de hotel para esa fecha. Además, aclararon que el feriado del lunes 20 no es un feriado puente, que normalmente es establecido por el Poder Ejecutivo, sino que está establecido por ley, lo que requeriría un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) para modificarlo.
Esta decisión ha llevado a especulaciones sobre la conveniencia política, ya que algunos sugirieron que la ausencia de votantes que estén de turismo en esa fecha podría beneficiar al candidato Sergio Massa, quien lideró la votación en la primera vuelta.
Consultado al respecto, el ministro de Economía y aspirante a la presidencia, Sergio Massa, declaró que la modificación del feriado del lunes 20 (Día de la Soberanía) es un asunto que «debe resolver el parlamento». También expresó su confianza en que la gente acudirá a votar independientemente de si hay o no feriado.
Por su parte, la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, también respaldó la decisión de mantener el feriado del día después del balotaje entre Massa y Javier Milei.
El presidente de la CNE, Alberto Dalla Vía, había enviado una nota al secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello, en la que recomendaba considerar medidas para trasladar el feriado del 20 de noviembre debido a la segunda vuelta electoral que se celebrará el 19 de noviembre. Sin embargo, el Gobierno ha confirmado que no se está evaluando esta posibilidad y que el feriado se mantendrá como estaba programado.
