Un estudio realizado por la Bolsa de Cereales de Entre Ríos y la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Entre Ríos revela que la provincia de Entre Ríos se enfrenta a un déficit significativo en la producción de maíz, lo que amenaza con afectar el abastecimiento interno de este vital insumo.
El estudio se centró en estimar la demanda de maíz en Entre Ríos, con un enfoque particular en el consumo de nutrición animal, incluyendo carne aviar, huevos, carne bovina, leche y carne porcina. Los resultados de este análisis indican que el consumo de maíz estimado en la provincia para el año 2022 supera los 2,7 millones de toneladas, siendo el principal sector demandante la producción avícola, con una necesidad de 1,9 millones de toneladas. Esto se debe a la alta cantidad de aves faenadas, que alcanza los 360 millones de cabezas anuales.
El desafío radica en que la producción local de maíz en Entre Ríos promedia alrededor de 1,8 millones de toneladas por campaña, lo que es insuficiente para satisfacer la demanda interna. Para compensar esta brecha, la provincia depende en gran medida de la importación de maíz de otras regiones de Argentina. Las principales provincias proveedoras son Córdoba, Santiago del Estero y Chaco, que se encuentran en el centro-norte del país.
Este déficit en la producción local de maíz plantea preocupaciones sobre la seguridad alimentaria en Entre Ríos y resalta la importancia de garantizar un suministro constante de este grano esencial para la producción ganadera y avícola. Las autoridades locales y nacionales deberán tomar medidas para abordar esta situación y asegurar que la provincia pueda mantener su producción y abastecimiento de alimentos en un futuro cercano.
