Senadores reciben a representantes de inquilinos para discutir la Ley de Alquileres y abordar la creciente crisis habitacional. Hoy, el Movimiento Nacional de Inquilinos se presenta en la Cámara de Senadores para instar a la declaración de la emergencia habitacional y el congelamiento de los precios de alquileres por un período de seis meses. En una reunión crucial, el movimiento buscará llamar la atención sobre la necesidad de revisar la Ley de Alquileres, que recientemente recibió una media sanción de la Cámara de Diputados, y proponer medidas para abordar la creciente crisis de vivienda que enfrenta Argentina.
Según datos proporcionados por el economista Federico González Rouco, autor del libro «Dueños o Inquilinos», el número de hogares que optan por el alquiler ha aumentado en un 34% desde 2016, alcanzando los 3 millones de hogares de inquilinos. Este incremento coincide con un crecimiento en el déficit habitacional, lo que resalta aún más la urgencia de abordar la demanda de viviendas y la necesidad de equilibrarla con un plan de viviendas asequibles que permita a más personas acceder a la propiedad.
El Movimiento Nacional de Inquilinos enfatiza que la crisis habitacional no se resolverá únicamente a través de cambios en la Ley de Alquileres. Por lo tanto, proponen la declaración de una emergencia habitacional inmediata y la implementación de un congelamiento de precios de alquileres similar al que se ha aplicado a los servicios públicos en los últimos meses.
Diego Fernández Camillo, de la Asociación Platense de Inquilinos, subraya que la población inquilina ha aumentado significativamente en la última década, mientras que la proporción de propietarios ha disminuido. Esto indica que la construcción de nuevas viviendas no es la solución definitiva al problema.
Además, el Movimiento Nacional de Inquilinos propone la creación de una Secretaría Nacional del Alquiler, en la que participen actores estatales relevantes, cámaras de propietarios y organizaciones de inquilinos. Esta medida se alinea con la visión de que la vivienda debe ser considerada un derecho y no simplemente un negocio.
El proyecto que obtuvo dictamen en Diputados, que busca acortar los plazos de locación y desregular los ajustes, ha generado preocupación entre los inquilinos. Natalia Ranzuglia, referente del sector, advierte que esto podría afectar la estabilidad económica de quienes alquilan y dejarlos desprotegidos en un momento económico desafiante.
Maximiliano Vittar Lucero, de la Asociación de Inquilinos de Córdoba, agrega que la reforma de la ley es contraproducente y podría dar lugar a contratos informales y prórrogas ilegales, lo que complicaría aún más la situación. En este sentido, enfatiza la necesidad de un mayor control por parte del Estado y una política pública efectiva de vivienda.
En resumen, el Movimiento Nacional de Inquilinos busca generar conciencia sobre la necesidad de declarar una emergencia habitacional y congelar los precios de alquileres, además de proponer una mayor regulación y control en el mercado de alquileres para abordar la creciente crisis de vivienda en Argentina. La reunión en el Senado es vista como un paso importante hacia la búsqueda de soluciones efectivas.
